Extraído de El País
El ejemplo de Adeom hace escuela
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CARLOS MAGGI
Hace mucho, el 27/7/97 copié en este diario las palabras siguientes:
- Líber Seregni: "Allende me dijo: Líber, pasa por Buenos Aires y dile a Héctor Cámpora que desde el primer momento del gobierno, sea muy duro".
"Hay que tener cuidado con el enemigo interno, las demandas perversas de los radicales (el MIR etc.); algunas ocupaciones ilegales y las huelgas, voltearon a Allende".
COMENTÉ: Los líderes de nuestra izquierda podrán decir mil veces lo que quieran decir, pero el final será siempre el mismo: si llegan a ser gobierno, estarán obligados a cumplir estrictamente las reglas universales de la economía global. Si simplifican y se limitan a sacarle a los ricos para darle a los pobres (o no tan pobres), la catástrofe no provendrá de las resoluciones del Frente Amplio; provendrá de la estampida de los capitales, huyendo despavoridos ante el peligro eventual de una manada de dinosaurios.
COMENTO: Estimado lector: Si quiere ver cómo es un país que se queda sin inversores, visite Cuba.
El Presidente Raúl Castro, advirtió: "La revolución irá `al precipicio` si no aplica las reformas económicas que incluyen la eliminación de 500.000 empleados estatales en seis meses".
Es una lucha dentro de la izquierda, que viene de lejos.
Entre las muchas maneras en las cuales Lenin describe "La enfermedad del `izquierdismo` dentro del comunismo", está lo que él llama "la aristocracia obrera", "los que se pasan al campo de la burguesía y son mantenidos por ella".
"Marx mereció el odio, que le honra, de estos canallas, porque los tildó públicamente de traidores." (El estilo de Lenín sale cortando).
Ahora el problema se da entre nosotros. Nuestro Ministro de Trabajo, Eduardo Brenta, anunció con razón:
- "Vamos a jugar activamente, con decisión. Todo el potencial negociador del Ministerio de Trabajo y el técnico del de Industria, va a estar destinado a solucionar esta problemática. Uruguay no puede darse el lujo de perder estas inversiones".
Mujica la tiene clara, pero esto es una batalla que se da en los hechos y no en las palabras. Si a los dirigentes gremiales a los cuales se les va la mano, sacan tajada, todos los dirigentes deberán excederse o serán sustituidos por muchachos más radicales, capaces de hacer cualquier cosa, incluso patear el tablero, con tal de obtener ventajitas.
Cuando el gobierno dice oficialmente, debemos "jugar activamente, con decisión"; el gobierno lo hace o deja de ser gobierno.
Leí con admiración las declaraciones de Rubén Villaverde, técnico en relaciones laborales, ex director del "Instituto Cuesta Duarte" perteneciente al "Pit-Cnt". (Radio El Espectador, 29/10/10).
Villaverde es un hombre que conoce el paño que corta: fue asesor del Pit-Cnt y está muy preocupado y lo dice públicamente.
Quienes ignoramos cómo se teje la tela sindical, tenemos tendencia a pensar que todos los conflictos son más o menos iguales. Pero no. Quien ve mejor y más lejos que nosotros, avisa que están encendidas varias luces amarillas de precaución.
Rubén Villaverde explica:
- En el presente, la calidad de algunos conflictos ha cambiado. Adeom ha sido exitoso en su estrategia de negociación, COFE no tanto, pero empieza a seguir ese modelo. Estos dos ejemplos en el sector público animan a algunos nuevos sindicatos de base, que no tienen aún una expresión consolidada dentro del Pit-Cnt, a buscar sistemas de respuesta rápida en materia salarial y de condiciones de trabajo. Se alejan de una práctica negociadora que ha sido lo tradicional en el Pit-Cnt.
Teníamos un sindicalismo consolidado; y la emergencia de prácticamente 200.000 afiliados nuevos a la central sindical, ha provocado la llegada masiva de dirigentes jóvenes que no han podido procesar aspectos de formación y de transmisión de conocimiento de los más veteranos.
En algunos casos existen desbordes que al Pit-Cnt le cuesta acompañar. Son nuevos comportamientos dados por la emergencia de dirigentes con poco apego a los partidos políticos que tradicionalmente actúan en la izquierda. Se mueven sin tener una apreciación del largo plazo o la visión de conjunto, en lo cual descansa la unidad del movimiento sindical, expresada en el Pit-Cnt.
El hecho de que tres empresas se hayan aproximado al entorno de la Presidencia de la República para decir "miren que si esto sigue así nos vamos", y que luego otra empresa más se sumara a este proceso (una multinacional del sector de la alimentación) muestra que las cosas empiezan a cambiar y que se deben tomar estos síntomas, como una referencia obligada.
Luego de la actividad en el hotel Conrad con el equipo del nuevo gobierno que presentó y animó a empresarios del exterior a venir al país, unos cuantos empresarios han realizado consultas sobre la pertinencia de instalarse en Uruguay; y tengo la impresión de que empiezan a aparecer algunos reparos, no precisamente debidos al Pit-Cnt ni debidos al funcionamiento más tradicional de las federaciones, que llevan adelante la negociación colectiva. Emergen actualmente expresiones concretas que no son controladas por la unidad sindical, como se da un caso en el sector de la alimentación.
Sé de emprendimientos empresariales que crecieron en los últimos tiempos, que no encuentran personal suficientemente calificado; no solo en cuanto al obrero especialista en tal o cual cosa; no encuentran jefes especialmente capacitados, para el desempeño de su tarea, para ser jefes.
El conflicto en la industria de la alimentación, que he tenido oportunidad de conocer bastante de cerca, tiene acuerdos firmados por dirigentes; y esos acuerdos han sido negados por los trabajadores. Cambian los dirigentes y no se termina nunca de consolidar un acuerdo.
Hay reflejos que no son exactamente sindicales; el comportamiento de la agremiación de los anestesistas se está repitiendo en alguna empresa en nuestro medio:
-"A mí no me importa absolutamente nada lo que pasa en el resto, a mí que me den la mía", esa visión que es extremadamente individualista, aunque se haga desde un sindicato, es terriblemente peligrosa, porque el sindicalismo se asienta en bases muy diferentes; el sindicalismo debe diferenciarse del corporativismo.
No estoy hablando de una negociación que transita por carriles normales, lentos pero normales, en miles y miles de empresas. Yo soy de izquierda, pero no puedo dejar de observar que hay elementos que anuncian un proceso inesperado. Hay desbordes, unos poquititos en el movimiento sindical. Pero está sucediendo a vista de todos: se puede tener un cáncer y que el anestesista decida no atenderlo.
Soy de izquierda, lo que no quiere decir que no me preocupen esas luces amarillas que están ahí, encendidas.
COMENTO: Corresponde ayudar al Pit-Cnt y su tradición de prudencia (léase Pepe D`Elía). Los presupuestos de hecho son muy claros. Solo falta saber qué hará el gobierno para encarrilar el asunto.
El País Digital
El ejemplo de Adeom hace escuela
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CARLOS MAGGI
Hace mucho, el 27/7/97 copié en este diario las palabras siguientes:
- Líber Seregni: "Allende me dijo: Líber, pasa por Buenos Aires y dile a Héctor Cámpora que desde el primer momento del gobierno, sea muy duro".
"Hay que tener cuidado con el enemigo interno, las demandas perversas de los radicales (el MIR etc.); algunas ocupaciones ilegales y las huelgas, voltearon a Allende".
COMENTÉ: Los líderes de nuestra izquierda podrán decir mil veces lo que quieran decir, pero el final será siempre el mismo: si llegan a ser gobierno, estarán obligados a cumplir estrictamente las reglas universales de la economía global. Si simplifican y se limitan a sacarle a los ricos para darle a los pobres (o no tan pobres), la catástrofe no provendrá de las resoluciones del Frente Amplio; provendrá de la estampida de los capitales, huyendo despavoridos ante el peligro eventual de una manada de dinosaurios.
COMENTO: Estimado lector: Si quiere ver cómo es un país que se queda sin inversores, visite Cuba.
El Presidente Raúl Castro, advirtió: "La revolución irá `al precipicio` si no aplica las reformas económicas que incluyen la eliminación de 500.000 empleados estatales en seis meses".
Es una lucha dentro de la izquierda, que viene de lejos.
Entre las muchas maneras en las cuales Lenin describe "La enfermedad del `izquierdismo` dentro del comunismo", está lo que él llama "la aristocracia obrera", "los que se pasan al campo de la burguesía y son mantenidos por ella".
"Marx mereció el odio, que le honra, de estos canallas, porque los tildó públicamente de traidores." (El estilo de Lenín sale cortando).
Ahora el problema se da entre nosotros. Nuestro Ministro de Trabajo, Eduardo Brenta, anunció con razón:
- "Vamos a jugar activamente, con decisión. Todo el potencial negociador del Ministerio de Trabajo y el técnico del de Industria, va a estar destinado a solucionar esta problemática. Uruguay no puede darse el lujo de perder estas inversiones".
Mujica la tiene clara, pero esto es una batalla que se da en los hechos y no en las palabras. Si a los dirigentes gremiales a los cuales se les va la mano, sacan tajada, todos los dirigentes deberán excederse o serán sustituidos por muchachos más radicales, capaces de hacer cualquier cosa, incluso patear el tablero, con tal de obtener ventajitas.
Cuando el gobierno dice oficialmente, debemos "jugar activamente, con decisión"; el gobierno lo hace o deja de ser gobierno.
Leí con admiración las declaraciones de Rubén Villaverde, técnico en relaciones laborales, ex director del "Instituto Cuesta Duarte" perteneciente al "Pit-Cnt". (Radio El Espectador, 29/10/10).
Villaverde es un hombre que conoce el paño que corta: fue asesor del Pit-Cnt y está muy preocupado y lo dice públicamente.
Quienes ignoramos cómo se teje la tela sindical, tenemos tendencia a pensar que todos los conflictos son más o menos iguales. Pero no. Quien ve mejor y más lejos que nosotros, avisa que están encendidas varias luces amarillas de precaución.
Rubén Villaverde explica:
- En el presente, la calidad de algunos conflictos ha cambiado. Adeom ha sido exitoso en su estrategia de negociación, COFE no tanto, pero empieza a seguir ese modelo. Estos dos ejemplos en el sector público animan a algunos nuevos sindicatos de base, que no tienen aún una expresión consolidada dentro del Pit-Cnt, a buscar sistemas de respuesta rápida en materia salarial y de condiciones de trabajo. Se alejan de una práctica negociadora que ha sido lo tradicional en el Pit-Cnt.
Teníamos un sindicalismo consolidado; y la emergencia de prácticamente 200.000 afiliados nuevos a la central sindical, ha provocado la llegada masiva de dirigentes jóvenes que no han podido procesar aspectos de formación y de transmisión de conocimiento de los más veteranos.
En algunos casos existen desbordes que al Pit-Cnt le cuesta acompañar. Son nuevos comportamientos dados por la emergencia de dirigentes con poco apego a los partidos políticos que tradicionalmente actúan en la izquierda. Se mueven sin tener una apreciación del largo plazo o la visión de conjunto, en lo cual descansa la unidad del movimiento sindical, expresada en el Pit-Cnt.
El hecho de que tres empresas se hayan aproximado al entorno de la Presidencia de la República para decir "miren que si esto sigue así nos vamos", y que luego otra empresa más se sumara a este proceso (una multinacional del sector de la alimentación) muestra que las cosas empiezan a cambiar y que se deben tomar estos síntomas, como una referencia obligada.
Luego de la actividad en el hotel Conrad con el equipo del nuevo gobierno que presentó y animó a empresarios del exterior a venir al país, unos cuantos empresarios han realizado consultas sobre la pertinencia de instalarse en Uruguay; y tengo la impresión de que empiezan a aparecer algunos reparos, no precisamente debidos al Pit-Cnt ni debidos al funcionamiento más tradicional de las federaciones, que llevan adelante la negociación colectiva. Emergen actualmente expresiones concretas que no son controladas por la unidad sindical, como se da un caso en el sector de la alimentación.
Sé de emprendimientos empresariales que crecieron en los últimos tiempos, que no encuentran personal suficientemente calificado; no solo en cuanto al obrero especialista en tal o cual cosa; no encuentran jefes especialmente capacitados, para el desempeño de su tarea, para ser jefes.
El conflicto en la industria de la alimentación, que he tenido oportunidad de conocer bastante de cerca, tiene acuerdos firmados por dirigentes; y esos acuerdos han sido negados por los trabajadores. Cambian los dirigentes y no se termina nunca de consolidar un acuerdo.
Hay reflejos que no son exactamente sindicales; el comportamiento de la agremiación de los anestesistas se está repitiendo en alguna empresa en nuestro medio:
-"A mí no me importa absolutamente nada lo que pasa en el resto, a mí que me den la mía", esa visión que es extremadamente individualista, aunque se haga desde un sindicato, es terriblemente peligrosa, porque el sindicalismo se asienta en bases muy diferentes; el sindicalismo debe diferenciarse del corporativismo.
No estoy hablando de una negociación que transita por carriles normales, lentos pero normales, en miles y miles de empresas. Yo soy de izquierda, pero no puedo dejar de observar que hay elementos que anuncian un proceso inesperado. Hay desbordes, unos poquititos en el movimiento sindical. Pero está sucediendo a vista de todos: se puede tener un cáncer y que el anestesista decida no atenderlo.
Soy de izquierda, lo que no quiere decir que no me preocupen esas luces amarillas que están ahí, encendidas.
COMENTO: Corresponde ayudar al Pit-Cnt y su tradición de prudencia (léase Pepe D`Elía). Los presupuestos de hecho son muy claros. Solo falta saber qué hará el gobierno para encarrilar el asunto.
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