sábado, 9 de abril de 2011

Hay malparidos y no sólo en las novelas

Qué horror. Leí este artículo y se me caían las lágrimas pensando en la vida que le espera a esta familia, a la víctima, ni qué hablar.

Hablan de que el juicio, más que justificado, puede demorar hasta 6 años!!!!!! Qué vergüenza!

Y cómo sobrevive esta familia mienstras tanto? De la caridad pública?

No tengo ninguna duda de que tiene el derecho a demandar al estado.

El Inau era responsable de este delincuente, estaba bajo su tutela y por tanto, todo lo que haya pasado a raíz de su fuga, es responsabilidad directa de quien debía custodiarlo, no sólo el Estado como tal, sino los funcionarios a cargo.

De la misma forma en que los familiares de los reclusos de la carcel de Rocha muertos en el incendio, tienen el derecho de demandar al estado, porque obviamente el estado era el tutor de todos ellos y todo lo que no se hizo y derivó en la muerte de los reclusos es pura, única y exclusivamente responsabilidad de los encargados del lugar de reclusión. Punto.

Entonces, no me entra en la cabeza que primero, no le hayan dado los datos que necesita el abogado para poder armar el caso, que haya tenido que apelar, y que todavía les queden 6 años por delante?

La Justicia de este país, se quedó en el tiempo, por decidia de todos los que han estado ocupando cargos en el Poder Judicial, que no han hecho nada por agilizar los trámites.

Y el Poder Legislativo, que está para legislar leyes, tampoco han hecho nada.

Sería bueno, que trabajen y justifiquen lo que se les paga, no alcanza con ir, cumplir el horario, y después irse para la casa, total, si así funcionó por 100 años puede funcionar igual por otro 100 y que otro se haga mala sangre, la ley del mínimo esfuerzo, como siempre, como toda la vida ha sido en el sector público. Aunque algún que otro "equivocado" hay, y se toma las cosas en serio.

Y por último, Gamou no tenés vergüenza, sos frenteamplista y si algo tienen ustedes, es el salir a la calle a protestar y a hacer reclamos, entonces cómo carajo podés decir que esa no era la forma de protestar? sos de cuarta, quién te creés que sos por ocupar un carguito en el legislativo? Cómo te atrevés a decir que no es la forma?

Entonces, según vos tan iluminado como tus compañeros hermanos camarada, cuál era la forma de exigir que se hagan cargo?


Extraido de El País
Demandarán a INAU por menor fugado

Víctimas de la violencia. Un juez hizo lugar al reclamo de Gerard Delay, baleado en el restaurante "Los Francesitos" el año pasado El infractor que le disparó estaba fugado de la Colonia Berro | Víctimas de la violencia. El abogado de Delay se propone ahora demandar al Estado por su responsabilidad en la fuga del menor Un caso que sería modélico

RENZO ROSSELLO

Seis meses después de aquella noche dramática Gerard Delay recibió la primera noticia alentadora: un juez le daba la razón y ahora podrá reclamar que el Estado asuma su responsabilidad. En tanto, se arregla para sobrevivir a un atraco violento.

Hace pocos días Gerard recuperó el movimiento de una mano. Puede hablar con soltura, pero el resto de su cuerpo está condenado a la parálisis. Permanece internado en el sanatorio del Banco de Seguros, en tanto con la ayuda de sus padres y sus hermanos se hacen modificaciones en su casa para emprender una nueva vida. Una vida que con su esposa Karen Meyer y sus dos hijos, una niña de 6 y un adolescente de 16, deben comenzar a aprender a vivir.

Poco después de recobrar la movilidad de su mano recibió la noticia de su abogado, Carlos Roselló: el Juzgado de lo Contencioso Administrativo de 4° Turno había hecho lugar a su reclamo. Consistía en conocer los antecedentes del adolescente de 16 años, apodado "El Chiquito", que en la noche del 18 de septiembre le disparó durante un asalto a la Cervecería "Los Francesitos", en San Marino casi la rambla.

El pedido fue rechazado por la Suprema Corte en primera instancia, por ello el abogado llevó su reclamo a la sede del Contencioso Administrativo.

"Lo que nos interesa es constatar que hubo efectivamente una omisión por parte del Estado, basado en el artículo 1.324 del Código Civil, que establece que el director de un establecimiento será el responsable de todos los aspectos de su funcionamiento", explicó el abogado de Delay.

El fallo del juez Fernández de la Vega rechazó la oposición a brindar la información e hizo lugar al pedido de Delay.

Uno de los puntos que al representante de la víctima le interesa probar es que el infractor cometió el atraco y el ataque contra Delay cuando debía haber estado cumpliendo medidas de seguridad en una dependencia del INAU. "Esto, en realidad, no nos consta. Solo sabemos por versiones de prensa que este menor estaba fugado de la Colonia Berro, por ello solicitamos información oficial", puntualizó Roselló.

Una vez que cuente con esa información el abogado se propone accionar una demanda civil mediante la cual el Estado compense económicamente a Delay por el daño físico.

"Hay daños por rebote en varios aspectos. Aquí hay que considerar los gastos de atención médica, el acondicionamiento de la vivienda, la posibilidad de adquirir un vehículo especial, el lucro cesante por los ingresos que ya no podrá percibir", explica el abogado.

El representante de Delay aún no maneja montos, pero estima que la cifra rondará el millón de dólares.

Ni Delay ni su familia esperan hacerse con esa suma en un plazo inmediato. Una demanda de este tipo puede llegar a demorar seis años antes de que un juez dirima el caso. Mientras tanto Gerard y su familia deberán costearse algunos medios -como la silla especial que necesitaría para desplazarse y que ronda los US$ 18.000 además de las obras de ampliación y readecuación en su casa-, antes de tener siquiera la certeza de algún tipo de resarcimiento.

"Mis piernas no tienen valor", dice el propio Gerard, en contraste con esa danza de cifras actuales y futuras.

POSTRADO. Desde hace seis meses Gerard Delay está internado en el sanatorio del BSE. Su esposa hace el viaje cada día para permanecer junto a él todo el tiempo que puede.

Gerard habla con locuacidad, en la conversación telefónica con El País se le oye animado. "Recibí la noticia con una gran satisfacción de que al menos algo se está haciendo", cuenta al referirse al momento en que su abogado le comunicó que, finalmente, el juez había fallado en su favor.

El episodio de aquella noche del año pasado no se aparta de su vida. "Si salimos a trabajar porque no alcanza para sustentar una familia y eso poco que uno tiene también se lo arrebatan, ¿entonces qué nos queda?", comenta con un dejo amargo.

Gerard, como lo sigue haciendo su hermana Jaqueline, ayudaba a su padre en la atención a las mesas del restaurante la noche que los dos adolescentes irrumpieron armados. Cuando vio a los dos chicos, de la misma edad que su hijo mayor, avanzar hacia los clientes Gerard intentó contenerlos. Levantó una mano de manera instintiva, pero el gesto fue interpretado como un movimiento hostil por "El Chiquito". Disparó el arma. El proyectil era una bala dum-dum, una munición prohibida precisamente por su alto poder destructivo, que le atravesó un brazo, el pulmón y uno de sus fragmentos se alojó en la médula.

Luego de estar al borde de la muerte Gerard inició un lento proceso de recuperación, aunque todos los pronósticos médicos ponen en duda que pueda salir de la parálisis casi total.

"Estoy haciendo ejercicios de elongación, pero ni siquiera puedo transferirme solo de la cama a una silla. Los médicos me dicen que tengo que bipedestar (ponerse de pie) al menos una hora por día, pero yo les digo ¿y cómo lo hago sin una silla? El sanatorio no tiene sillas, porque no hay antecedentes de un caso como el mío. Y uno se pregunta a veces, bueno, ¿pero y esto no lo pagamos todos, adónde van los recursos entonces? Pero, bueno, así son las cosas", cuenta Gerard desde el sanatorio.

La inmovilidad casi absoluta trae aparejadas complicaciones inimaginables para quien no la padezca.

"Hay cosas que son muy difíciles de llevar. El otro día hablaba con mi hija de seis años y trataba de explicarle que papá no podrá acompañarla a la escuela, no podrá levantarla en brazos. ¿Pero cómo le hago entender a una niña de seis años que papá no puede caminar? A mi hijo mayor, que sí puede entender, cómo puedo sentirme yo que no lo puedo ir a buscar, acompañarlo a un partido. Él mismo me dice que a veces hasta tiene miedo de andar solo. Mi señora, que ahora se tiene que arreglar sola, porque yo era el sustento principal de la familia. Se desarmó toda una familia", dice Gerard.

LA DEMANDA. El fallo del Contencioso Administrativo no es más que, en realidad, el prólogo para futuras acciones legales.

Con el fallo del juez ya en su poder el abogado Carlos Roselló comenzó por pedir la información que se le había negado hasta el momento.

El primer oficio es dirigido a la Comisaría de Menores (Jefatura de Policía), así como a los cuatro turnos de los Juzgados Letrados de Adolescentes a los que se solicitan los expedientes instruidos al menor M.E.F.F., alias "El Chiquito", y por último al INAU, al que se le solicita "indicar detalles de fugas de dicho menor de la Colonia Berro u otras instalaciones a su cargo, debiendo acompañar la información previamente referida de los estudios de peligrosidad que se le hayan practicado, relevamientos psicológicos, etc., así como todo otro que tenga en su poder relativo al mismo", según expresa el escrito al que tuvo acceso El País.

"Yo confío en que los organismos respondan, pero en caso de no hacerlo estoy dispuesto a accionar demanda en lo penal por desacato al mandato de la decisión de un juez", señaló Roselló.

"Hay muchas vicisitudes por delante. Como abogado no suelo garantizar el resultado de un juicio, y eso es algo que la familia ha comprendido muy bien", indicó el asesor letrado.

Todo el procedimiento ante los estrados judiciales puede llevar hasta seis años antes de alcanzar una resolución. En caso que la misma sea adversa al demandante, queda la instancia de un tribunal de casación, en la órbita de la Suprema Corte de Justicia.

Mientras tanto, Gerard Delay deberá confiar en su biología, en el soporte de su familia, en la solidaridad de amigos y de decenas de personas que, al enterarse del drama, se acercan a "dar una mano". "Todavía no he perdido las esperanzas", dice Gerard antes de despedirse.

La cifra
US$ 1: es el monto por el que se estima se demandará al INAU por el caso de Gerard Delay, baleado en el restaurante "Los Francesitos".

"Solo había dos sobrevivientes, todos los demás estaban muertos"
El 15 de marzo pasado casi 200 personas marcharon al Palacio Legislativo. Todos ellos eran víctimas y familiares de víctimas de delitos. Entre ellos estaba Jaqueline Delay con su esposo. "Nosotros sólo llevábamos una pancarta con el nombre de Gerard", contó Jaqueline.

Un grupo de delegados fue recibido por los diputados Luis Lacalle Pou, Carlos Gamou, Graciela Matiaude, e Iván Posadas.

"Lo que me quedó grabado fue cuando empezaron a leer la lista de víctimas. Solo había dos sobrevivientes, mi hermano y otro muchacho que quedó también paralítico después de haber sido baleado en una rapiña. Los demás, todos estaban muertos. Era horrible, ahí me di cuenta de lo que estamos pasando", recordó Jaqueline Delay.

Es probable que casi ninguno de los participantes de la movilización conserve un recuerdo agradable de ese momento. Cuando el diputado frenteamplista Carlos Gamou les observó que esa forma de protesta no era adecuada, muchos se indignaron. "¡Cobarde, que nunca te toque a vos!", le gritaron con indignación.

Colaboración. Dos cuentas en el BROU para enviar aportes: en pesos la cuenta 200.75080; en dólares la 200.75099. Colectivo en la red Abitab: 21.259.


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