Al Sr. Presidente de la República Don José Mujica.
Quiero aclarar que esta carta no esta motivada porque su proyecto de enviar a los militares mayores de 70 años a prisión domiciliaria se vio frustrado, ya sea por falta de apoyo político o por falta de liderazgo.
Aunque en mi calidad de “viejo y enfermo”, en palabras de la Dr. Azucena Berrutti yo seria uno de los beneficiados alguien podría pensar que le escribo por intereses creados pero no es el caso.
No escribí antes porque les había prometido a algunos camaradas que hasta que hubiera una definición sobre el tema me abstendría de hacerlo. Esos camaradas tenían esperanzas y confiaban en que solo alguien como Usted podría solucionar este tema.
Seria un mentiroso sino le dijera que a esta altura de mi vida mi única aspiración es estar en mi casa, razón por la cual desde antes que Usted fuera candidato presidenciable ya había solicitado la prisión domiciliaria, la cual me fue negada 4 veces por mi peligrosidad.
Siempre que me hablaron de una posible solución política encaminada por Usted manifesté lo mismo, su fuerza política carece de la grandeza suficiente como para lograr la conciliación nacional. En sus filas tiene gente que solo busca venganza, réditos políticos y económicos a costa de reparaciones merecidas o no.
Son tan obtusos que ni siquiera pueden respetar 2 pronunciamientos del soberano en relación a “Ley de Caducidad”.
Por otro lado considero que medias tintas no hacen a la justicia ni son moralmente correctas, ustedes tuvieron su Amnistía General e Irrestricta y ahora pretenden que unos por viejos vayan a sus casas mientras otros por jóvenes permanezcan presos. Por lo tanto libertad para todos o para nadie.
Tampoco quiero dejar pasar el tema de los detenidos en Argentina ni los 3 camaradas extraditados en Chile, caso único en el mundo.
Mucho menos que entre los detenidos exista un leal Sargento imputado por situaciones que rayan en lo increíble.
Lo que es lamentable más allá de sus intenciones es que no haya consultado con su fuerza política antes de proponer semejante proyecto, creando falsas expectativas que más que generar consensos genera más divisiones. Pero lo mas grave de toda esta situación es que Usted que se considera un viejo combatiente se deje avasallar por algunos imberbes que jamás se enfrentaron a las balas, soportaron la cárcel o perdieron a un camarada.
Algunos de los motivos que Usted maneja es evitar que se les mueran los viejos en la cárcel para que no sean mártires, esto no lo motiva la búsqueda de la conciliación nacional.
Usted conoce bien lo que es estar preso, por lo tanto sabe que no es lo mismo tener 20 o 30 años que tener 60 o 70.
Por lo tanto Señor Presidente le agradezco sus intensiones pero si algún día regreso a mi casa quiero hacerlo con la frente alta y el respeto de mi familia y camaradas sin depender de las dadivas espurias o la conveniencia política del gobierno de turno.
Para finalizar debo decir que con Soldados presos y extraditados convertidos en Prisioneros Políticos nunca podrá haber Reconciliación Nacional.
Cnel. (R) Ernesto Ramas
C.I. 707.695-5
Quiero aclarar que esta carta no esta motivada porque su proyecto de enviar a los militares mayores de 70 años a prisión domiciliaria se vio frustrado, ya sea por falta de apoyo político o por falta de liderazgo.
Aunque en mi calidad de “viejo y enfermo”, en palabras de la Dr. Azucena Berrutti yo seria uno de los beneficiados alguien podría pensar que le escribo por intereses creados pero no es el caso.
No escribí antes porque les había prometido a algunos camaradas que hasta que hubiera una definición sobre el tema me abstendría de hacerlo. Esos camaradas tenían esperanzas y confiaban en que solo alguien como Usted podría solucionar este tema.
Seria un mentiroso sino le dijera que a esta altura de mi vida mi única aspiración es estar en mi casa, razón por la cual desde antes que Usted fuera candidato presidenciable ya había solicitado la prisión domiciliaria, la cual me fue negada 4 veces por mi peligrosidad.
Siempre que me hablaron de una posible solución política encaminada por Usted manifesté lo mismo, su fuerza política carece de la grandeza suficiente como para lograr la conciliación nacional. En sus filas tiene gente que solo busca venganza, réditos políticos y económicos a costa de reparaciones merecidas o no.
Son tan obtusos que ni siquiera pueden respetar 2 pronunciamientos del soberano en relación a “Ley de Caducidad”.
Por otro lado considero que medias tintas no hacen a la justicia ni son moralmente correctas, ustedes tuvieron su Amnistía General e Irrestricta y ahora pretenden que unos por viejos vayan a sus casas mientras otros por jóvenes permanezcan presos. Por lo tanto libertad para todos o para nadie.
Tampoco quiero dejar pasar el tema de los detenidos en Argentina ni los 3 camaradas extraditados en Chile, caso único en el mundo.
Mucho menos que entre los detenidos exista un leal Sargento imputado por situaciones que rayan en lo increíble.
Lo que es lamentable más allá de sus intenciones es que no haya consultado con su fuerza política antes de proponer semejante proyecto, creando falsas expectativas que más que generar consensos genera más divisiones. Pero lo mas grave de toda esta situación es que Usted que se considera un viejo combatiente se deje avasallar por algunos imberbes que jamás se enfrentaron a las balas, soportaron la cárcel o perdieron a un camarada.
Algunos de los motivos que Usted maneja es evitar que se les mueran los viejos en la cárcel para que no sean mártires, esto no lo motiva la búsqueda de la conciliación nacional.
Usted conoce bien lo que es estar preso, por lo tanto sabe que no es lo mismo tener 20 o 30 años que tener 60 o 70.
Por lo tanto Señor Presidente le agradezco sus intensiones pero si algún día regreso a mi casa quiero hacerlo con la frente alta y el respeto de mi familia y camaradas sin depender de las dadivas espurias o la conveniencia política del gobierno de turno.
Para finalizar debo decir que con Soldados presos y extraditados convertidos en Prisioneros Políticos nunca podrá haber Reconciliación Nacional.
Cnel. (R) Ernesto Ramas
C.I. 707.695-5
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