jueves, 30 de diciembre de 2010

ATROPELLOS AL SISTEMA DE DERECHO CIUDADANO

Si ya la Justicia de este país me daba desconfianza, lamentablemente, ahora con esto, qué puedo decir.

Hoy les toca a los militares que entonces eran apenas recién ingresados en la fuerza, ojalá mañana les toque a los asesinos que nos gobiernan y que nunca han cumplido ni un minuto de cárcel y nadie, absolutamente nadie del poder político dice una palabra.

Unos porque dicen respetar el veredicto de la Justicia, así sean paquetes como el que narra la carta que recibí.

Una absoluta vergüenza, vergüenza de vivir en un país que se ha convertido no sólo en mediocre sino además, en un país sin ley, sin jueces, sin derechos, sin nada.

Hasta dónde y hasta cuándo vamos a permitir esto?

Se despertará la oposición o seguirá acomodando el trasero para no perder el puestito?

Recibo y publico

A modo de introducción
" 21/12/2010 07:42 a.m.

Doctor:

En estos momentos de un inminente procesamiento , me asalta la mayor indignacion y rebeldia al respecto.

Sepa que me dirijo a Ud, por este medio , ante la sensacion que no he tenido mas que oportunidades "telegraficas " de comunicacion verbal con Ud, ante sus multiples actividades y su falta de tiempo para conmigo.

Entiendo que el JUEZ dispuso una exhumacion de los restos y de alli sacaron , sobre el "polvo necrosico", conclusiones que me perjudican.

Pregunto: ¿la defensa no debia ser notificada de tal actuacion? ¿Que garantias ofrece la seriedad de la misma? NI siquiera podemos saber los nombres de los tecnicos que la realizaron.

*¿Porque dice Ud, que no puede ser recusada?*
*
*
¿NO se puede pedir una nueva pericia a costo nuestro?
¿NO percibe UD una intencionalidad con la determinacion de " Cal. 22" como proyectil fatal?

Si pudiera tomarse Ud unos minutos, en Internet figura un articulo, donde el abogado denunciante se queja de la falta de comunicacion de tal instancia a la familia del occiso.Eso fue en setiembre.

Le pido las disculpas del caso pero comprendera mi estado animico, ante una situacion que Ud, siempre desestimo, ante su conviccion de que estaban claras las eximentes y la exposicion real de los hechos.

Para su conocimiento, le adjunto un carta elaborada por un querido camarada, para ser publicada en Busqueda,donde ilustra el sentir de gente comun ante la situacion.
Yo no participe en nada , en su elaboracion.

Cordiales saludos.
(omito el nombre del autor de esta introducción)


AL PUEBLO ORIENTAL

En la República Oriental del Uruguay otra vez la justicia procesa injusta e ilegalmente, a un Oficial del Ejército Nacional.

El Cnel. Tranquilino Machado, que hirió de muerte a un militante comunista en el mes de Junio de 1973, fue procesado después de 37 años, de supuestamente cometido un delito.

Con las pruebas que se determinaron en una nueva AUTOPSIA realizada en estos días al cadáver del fallecido, mejor dicho al polvo necrósico del cadáver, por forenses que con seguridad son excelentes profesionales, casi rozando sus capacidades con las de los magos y las de los adivinos y a 37 años de realizada la primera autopsia la justicia uruguaya pudo constatar que la bala ingresó exactamente al revés de cómo se dictaminó en la oportunidad.

Los hechos se produjeron, una lluviosa tarde-noche, en un enfrentamiento COMPROBADO, en que el entonces Alférez, con nada más que 10 meses de recibido, actuó reglamentariamente, encuadrado en las leyes vigentes y en el régimen de obediencia debida, repeliendo un ataque de tres disparos a su persona.

Todos los hechos están en los expedientes y en el alegato de la defensa perfectamente expuestos, pero el Sr. Juez dispuso sin pruebas y sin semiplena prueba como exige la Constitución de la República, la prisión de este ciudadano, un militar ejemplar.

Se trata de la primera muerte después del golpe de estado de 1973, y eso es la principal razón subjetiva que explica este procesamiento, la justicia y los radicales comunistas van a festejar en las fiestas que metieron otro militar en prisión.

En esta oportunidad, no cazaron a otro “genocida”, tampoco se satisface con este procesamiento a familiares de un “desaparecido”, simplemente mandan entre rejas a un militar hoy retirado, que le tocó cumplir una orden dada por un superior con jerarquía Capitán, todos del mismo Ejército Nacional que tenemos hoy en día, encuadrados en la plantilla de oficiales de una Unidad reglamentaria, con jefes que a su vez tenían los escalones superiores que los controlaban, como corresponde.

Tampoco importan las características de la vida del declarado “reo”, fue un ciudadano ejemplar, abogado recibido en la Facultad de Derecho, con una familia normal construida por un matrimonio feliz, y una carrera militar sin la menor tachadura, con calificaciones rozando la excelencia, donde se destaca una brillante dirección del Liceo Militar “Gral. Artigas”.

Jamás podían pensar la familia Machado que se iba a deteriorar el sistema de derecho que siempre protegió a la ciudadanía en nuestro país. Jamás podían predecir que la crueldad de un sistema jurídico corrupto y politizado iba a cortar la felicidad familiar, justo cuando los tiempos ganados con sacrificio y responsabilidad, traían el sosiego y la tranquilidad a los abuelos.

La justicia separa de esta manera de la sociedad, a este ciudadano por encontrarlo peligroso, debido a que pudo comprobar ahora, que en aquella oportunidad actuó con “brutal ferocidad”, determinada con “sabiduría y objetividad jurídica” gracias a la autopsia realizada, sin presencia de la defensa, ni de testigos de parte del acusado, reitero 37 años después.

Denuncio ante el pueblo oriental y ante el mundo, esta barbaridad, este atropello. Denuncio que los ciudadanos que elegimos esta profesión, la profesión militar, estamos desamparados, a merced de una política simple de venganza y de revanchismo.

Este caso debe de representar la gota que rebasó el vaso, las instituciones con dignidad, las embajadas acreditadas, los organismos internacionales que se jactan de defender los Derechos Humanos, la iglesia católica y muy especialmente EL PUEBLO ORIENTAL, debemos reclamar y exigir que se restablezca el estado de derecho en nuestro país.

La justicia debe dedicarse con más responsabilidad a combatir a aquellos que tienen a la población de rehén, los ladrones y los traficantes de drogas y dejar de una vez por todas de procesar inconstitucionalmente a militares por el solo hecho de haber evitado que triunfaran aquellas inconmensurables utopías revolucionarias de hace 40 años atrás.

BASTA DE ATROPELLOS AL SISTEMA DE DERECHO CIUDADANO

Montevideo, 23 de Diciembre 2010
CNEL. (R) WALTER FORISCHI

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